Liquidambar styraciflua

¡Es uno de nuestros árboles preferidos y el que lucimos en nuestra vereda!
Es un hermoso árbol caduco, de porte estrecho y cónico en sus primeros años y que se ensancha a medida que envejece.  Tiene además una de las más vistosas otoñadas: adquieren los colores amarillo, rojo y bordeaux, siempre que reciban abundante sol, siendo más dramáticos los colores cuando los otoños son luminosos y fríos y sin lluvias tempranas que tiren sus hojas.

Su tronco es muy característico, por las profundas hendiduras corchosas de la corteza. 

Su crecimiento es lento en los comienzos, bastante rápido a partir del tercer o cuarto año de instalado y luego se estanca en cuanto alcanza la madurez.

Su rápido crecimiento y su gran tolerancia lo convierten en un árbol idóneo para proporcionar sombra y frenar la acción del viento.

. Luminosidad: pleno sol
. Suelo: prefiere el ácido antes que el calcáreo y de esa forma dará mejores coloraciones otoñales.
. Riego: necesita de humedad en el suelo, prosperando muy bien en lugares donde el agua se encuentra a poca profundidad. Evitar encharcamientos.